domingo, 10 de noviembre de 2019

Profesionalización de la Policía Local

Por J.Conesa


Algunos piensan que para ser buenos profesionales basta con tener buenos medios para trabajar, personal suficiente y una remuneración adecuada.

Pero esto en realidad suponen unas buenas condiciones de trabajo. Para ser unos buenos profesionales lo primero es que se nos reconozca dentro de la profesión, se habiliten los sistemas adecuados para formarse en ella y se nos reconozca homologables dentro de la misma. 

La profesionalización de los Cuerpos de Policía Local ha sido de siempre uno de los objetivos básicos de CCOO para el servicio público de seguridad local.

Y ésta pasaba por conseguir los niveles más altos posibles en el encuadramiento dentro de la función pública, la formación previa al ingreso, la carrera académica y profesional posterior al mismo y el respeto por parte de todos los poderes e instituciones.

Así hemos estado peleando desde los años 80 del siglo pasado. Con la Ley 2/86 de FFCCS, con las leyes 2/90 y 6/99 de Coordinación, donde conseguimos pequeños avances, pero donde no se pudo cerrar nunca el capítulo referido a la equiparación profesional con los otros cuerpos policiales.

La ley 6/99 dedicó un capitulo a regular el interinaje en los Cuerpos de Policía Local. El objetivo, al desarmar al personal interino (hasta entonces también llevaban armas), al limitar su nombramiento a funciones de policía administrativa, medio-ambiente y tráfico, no era otro que el de hacer que los ayuntamientos, optaran por funcionarios de carrera por resultar mas rentables ya que estos contaban con todas las prerrogativas en sus actuaciones frente al policía en precario que las tenía limitadas.

No fue así. Las plantillas de policía local valencianas se fueron precarizando con el mayor numero de policías interinos de toda España. No se les dota de armas, pero se les destina a labores de seguridad ciudadana, se les exigen las mismas responsabilidades y se les mantiene en una constante inquietud e inseguridad jurídica y de futuro, lo que permite a los responsables políticos manejar a su antojo a estos compañeros y compañeras.

Después de más de treinta años peleando por la profesionalización, conseguimos que el nuevo "Govern del Botànic", asumiera la elaboración y aprobación en Corts de una Ley que reconocía la profesionalización del colectivo, el establecimiento de un periodo transitorio para la consolidación de plazas y desaparición de la temporalidad, fijaba nuevos horizontes de colaboración supramunicipal, el inicio hacia la creación de un marco autonómico de seguridad, etc.

Pero todo ello chocó con aquellos que nos quieren estos cambios, me da igual como los llamemos: conservadores de izquierdas o de derechas, todos ellos reaccionarios, contrarios a la profesionalización porque ello podría implicar limitar su capacidad de decisión y de gestión, aunque ello vaya en beneficio de la seguridad publica, de la calidad de servicios y de garantías a la ciudadanía.

Es preferible, como dice un amigo mío y un buen profesional, que sigamos siendo "unos cucharillas".

Y finalmente, parece que se impone el "lado oscuro", aquellos que en la sombra han estado boicoteando la Ley 17/17. Imposibilitando su desarrollo, obviando el cumplimiento de la misma, retrasando sin justificación su aplicación y forzando la judialización de todos los temas.

Y lo mas triste es cómo han conseguido que el Govern del Botànic II, se replantee las máximas y premisas que dieron origen a la Ley que contó con el mayor proceso de participación que ninguna ley de coordinación ha contado. Cuestionando el objetivo iniciado en esta Ley de profesionalización total de los Cuerpos de Policía Local.

El pasado día 7 de noviembre de 2019, en una entrevista con la Consellera de Justicia y Administración Pública Gabriela Barvo, nos trasladó su posición contraria a seguir en la línea de profesionalización marcada en la ley. La decisión que había adoptado de introducir cambios en la misma en orden a permitir que subsista la temporalidad y precariedad en los Cuerpos de Policía Local y su visión de las policías locales como funcionarios subsidiarios de los cuerpos estatales.

Comenzó su disertación indicando que la Ley de Coordinación justificaba en su exposición de motivos que la profesionalización y por tanto la desaparición de la temporalidad y consolidación de plazas, se debía a las sentencias que se estaban pronunciando en ese sentido cuando la ley se elaboró. 

Quedamos sorprendidos y le explicamos que eso no era así. Que obedecía a una apuesta política y sindical contra la precariedad y por la profesionalización, como otras cosas que contiene la ley.

Invito a que leáis la mencionada "exposición de motivos": 

  • Otra de las cuestiones a destacar en la ley es la apuesta decidida para acabar con la inestabilidad laboral de un elevado número de agentes de policía local en situación de interinidad. Una situación que trae causa, por un lado, de la necesidad de atender sin demora la prestación ordinaria del servicio y, por otro, de la imposibilidad de incluir las vacantes de modo regular en las ofertas de empleo público debido a las restricciones en la tasa de reposición de efectivos recogidas en las leyes de presupuestos anuales, con especial intensidad desde el año 2010.
  • Esta ley aborda de forma directa dos situaciones coyunturales que las policías valencianas deberán afrontar en un breve espacio de tiempo. En primer lugar, un proceso de consolidación de los funcionarios interinos, estableciendo un proceso de consolidación que acabe con la precarización laboral instaurada en la última década. En segundo lugar, la previsión ante la inminente regulación de la jubilación anticipada de los miembros de los cuerpos de las policías locales que está tramitando el gobierno del Estado, con la apuesta por la eliminación definitiva del personal interino en las plantillas de las policías locales valencianas.
Esta reflexión introducida en la exposición de motivos fue en síntesis consecuencia de lo que he dicho y no por razón de sentencias que en ese momento no se habían dado aún, mucho menos la del Supremo que consideró no ajustada a derecho la interinidad en policía local y que luego el Constitucional le ha dado la vuelta.

En fin. Ella se mantuvo en "sus trece" como se suele decir y en su empeño en normalizar de nuevo la temporalidad en los cuerpos de policía local.

Le advertimos que cueste lo que nos cueste desde CCOO vamos a seguir luchando, aunque nos lleve 30 años mas, hasta conseguir nuestra total profesionalización  y equiparación con las FFCCS en términos de reconocimiento y competencia.   

3 comentarios:

  1. Seguiréis haciendo lo que el gobierno que mande os diga,pero haciendo creer lo contrario,es vuestra razón de ser y existir

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  2. Desde hace tiempo que vengo diciendo que somos la sartén donde otros mierdas manejan el mango y la mueven a sus antojos politicos. Eso es lo que yo digo.

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