lunes, 20 de mayo de 2019

Lo que las palabras esconden



Una reflexión. Se acercan las elecciones municipales y como en cada ocasión empezamos a recibir insistentes mensajes, intentando convencernos de las bondades y las “verdades” que entrañan las promesas de cada opción.
Como si la machacona reiteración de dichos mensajes acabara garantizando su veracidad.
Resulta imprescindible adoptar una actitud critica con éstos si no queremos caer en la trampa de dar por acertados ciertos mensajes que en realidad esconden lo contrario de lo que predican.
Por ejemplo, vemos como va calando el mensaje de “la rebaja de impuestos”. No voy a entrar en el hecho constatado de que tenemos el nivel de presión fiscal por debajo de la media europea. Pero si en llamar la atención sobre algo que a todas luces es una evidencia: ¿Quien llama a subir los impuestos? Evidentemente nadie.
Llamar a la rebaja de los impuestos con carácter general, como lo sería llamar a la subida de los mismos con carácter general, sería sencillamente estúpido. Y además desconocer lo mas básico del ordenamiento jurídico español, pues el peso impositivo debe ser progresivo en función de las capacidades económicas del contribuyente.
La promesa-propuesta de rebaja fiscal general en “abierto”, sin más, como consigna electoral esconde en buena lógica un tratamiento discriminatorio a los menos pudientes a favor de los más (como de está sucediendo en Andalucía con el gobierno del PP), puesto que cualquier decisión en este sentido sin corrección alguna solo puede llevar por objetivo beneficiar a los de mayor capacidad adquisitiva.
O como en tiempos de Rajoy, lo que se reduce en los impuestos directos se acaba pagando con creces en los impuestos indirectos.
Todas estas palabras tienen el mismo valor simbólico que otras que nos hemos cansado de oír durante esta crisis y de las que hemos aprendido su verdadero significado como “ajustes”. Pues hemos comprobado que ha dejado de tener un valor positivo como se le supone para significar en realidad “recortes”. Recortes en derechos, en capacidad adquisitiva, en puestos de trabajo, etc.
Hemos podido comprobar como en el transcurso del tiempo los más pudientes se han enriquecido todavía más. ¿Será este el significado de otras palabras que no hemos dejado de oír durante todo este tiempo? La crisis es una oportunidad.
Ante las elecciones: Más memoria, más análisis, más lectura ya que por sus hechos los conoceréis.
Apartemos las grandes declaraciones, las frases estudiadas o los mensajes subliminales. ¿Qué queda? Lo que son. Y por tanto aprendamos a diferenciar.
Quien más promete, más miente. Quien provoca tu ira es que sólo te quiere manipular, porque se manipula desde las vísceras, pero no desde la razón.

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