Sorprende, una vez más, la reiteración de hechos tan lamentables como las agresiones a funcionarios policiales que como servidores públicos están llamados, en su día a día, a garantizar la seguridad en las ciudades, y enfrentarse a los violentos que intimidan y agreden cada día perturbando la tranquilidad en las calles. Esto mismo sucedió el pasado domingo 27 de agosto en la localidad de Guardamar del Segura, cuando una patrulla de policía local intervino para realizar una prueba de alcoholemia preventiva a un conductor y en el transcurso de la misma, se vieron sorprendidos por cinco hombres que dirigieron toda su ira contra los policías locales.
Lo que ya no nos sorprende, porque lo hemos denunciado infinidad de ocasiones y es vergonzoso que siga sucediendo en nuestra comunidad autónoma y en nuestros municipios, es la falta de medios, de recursos humanos de calidad, de inversión de dinero público por parte de la clase política dirigente, en el servicio público policial. CCOO va a requerir al Ayuntamiento de Guardamar de Segura que ponga todos los mecanismos jurídicos a su alcance, en protección de sus policías, para exigir las responsabilidades civiles y penales a los energúmenos que cometieron las agresiones. Pero NO BASTA con actuar cuando el mal ya está hecho. ¿Dónde está la prevención y la inversión en medios? Fuentes por confirmar nos indican que ese día, en el turno de trabajo donde sucedieron los hechos, había sólo 4 policías locales, en una población que pasa de los 16000 habitantes en invierno a algo más de 100.000 en verano. Cuatro policías locales de los cuales, dos más, es decir, la otra patrulla que podía acudir en auxilio de sus compañeros agredidos eran dos funcionarias interinas con pocas semanas de experiencia. Es de agradecer el auxilio recibido por los compañeros de la Guardia Civil.
Resulta intolerable que el alcalde de Guardamar del Segura permita que la convivencia ciudadana en el municipio que gobierna tenga que garantizarlo, eliminando la violencia callejera, cuatro policías locales de servicio en un turno de trabajo, en plena vorágine estival de excesos, alcohol, drogas y peleas. Y para colmo, con la mitad de ese turno con policías interinas, que sin apenas formación, tiene que soportar un estrés y responsabilidad tan grande.
Es evidente que no sólo en Guardamar del Segura sino en la inmensa mayoría de plantillas de Policías Local de la Comunidad valenciana se hace necesario una enorme inversión en medios humanos y materiales. Según informe de la ONU, se recomienda 300 efectivos policiales por cada 100.000 habitantes. La Unión Europea reduce esa cantidad a casi 200 policías. El Ayuntamiento de Guardamar del Segura tiene una plantilla de apenas 40 efectivos policiales, varios en segunda actividad, que no patrullan. Desde Comisiones Obreras llevamos muchos años denunciando esta situación, que insistimos, no sólo ocurre en Guardamar del Segura, sino en muchas plantillas, que establecen patrullas unipersonales, que crean Cuerpos de Policía Local sin recursos para dotarlos, en lugar de mancomunar servicios con poblaciones vecinas, etc etc. Y ni qué decir de medios materiales. No hablamos únicamente de poder dotar a las policías locales interinas de armas de fuego, mediante formación adecuada en el manejo de las mismas, ya que nuestros dirigentes políticos autonómicos se empecinan en seguir manteniendo policías locales interinos, cuando en la mayoría de comunidades autónomas la figura del interino policial ya está PROHIBIDA. Llevamos desde 2017 reclamando esta cuestión sin éxito de momento. Desde CCOO exigimos mejoras de dotación de pistolas TASER unipersonales con formación obligatoria para todos los funcionarios policiales. Y exigimos mayor inversión en elementos de protección individuales: ¡¡Un chaleco para un policía ¡¡¡. Nada de chalecos colectivos.
Pero no nos equivoquemos. Lo que les ha sucedido en esta ocasión a la compañera y el compañero policías en Guardamar le podría haber sucedido a cualquier policía que patrulla las calles de su ciudad. Y únicamente los equipos de protección individual no les salva a las policías locales de verse inmersos en actuaciones frente a personas agresivas y violentas. Es fundamental dar un giro de 180 grados en impulsar una MEJOR FORMACIÓN Y PERFECCIONAMIENTO CONTINUO de las policías locales así como implantar en todas las plantillas policiales PROTOCOLOS DE ACTUACIÓN EN MATERIA DE SEGURIDAD CIUDADANA. CCOO denuncia que esta cuestión última ni existe ni se espera por parte de quienes tienen la responsabilidad pública de garantizarlo. A nivel autonómico tenemos un Instituto Valenciano de Seguridad Pública y Emergencias, gobernado por una Consellería, que verdaderamente no cree en la Policía Local, y más en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad estatales. Los cursos de formación continua y de perfeccionamiento son escasos, apenas llegan al 20% de los efectivos de policía local de la Comunidad valenciana. Se convocan cada dos años y mal. Y luego tenemos los ayuntamientos, que en materia de formación policial no invierten lo más mínimo.
Es necesario una Formación especializada en seguridad ciudadana, en defensa personal, que debería ser obligatoria y contínua, y que las administraciones locales no impulsan, entre otras cosas porque no tienen un mandato legal que les obligue. La Ley de Coordinación de Policías Locales de la Comunidad valenciana sólo recoge la obligatoriedad a los Ayuntamientos de efectuar dos prácticas de tiro policial con armas de fuego al año, algo evidentemente escaso, pero nada dice del resto de formación. Y la cruda realidad de la calle es que los problemas de inseguridad ciudadana que se encuentran las policías locales en sus municipios no se resuelven a tiros, sino con un buen entrenamiento en táctica policial, en técnicas y procedimientos policiales, para repeler agresiones, etc.
Desde Comisiones Obreras queremos denunciar que dicha formación policial NO SE IMPARTE por ninguna administración pública. En consecuencia los policías locales tienen que formarse por su cuenta, quienes pueden.
La Agrupación Sindical de Policia Local de Comisiones Obreras vamos a exigir al Gobierno valenciano una modificación normativa para implantar la formación mencionada con carácter obligatorio en los Cuerpos de Policía Local.
Desearles una pronta recuperación por las agresiones sufridas a la compañera y el compañero de Guardamar del Segura y enviarles todo nuestro apoyo.