Por Julio Conesa
He recibido la información sobre la primera reunión de la Comisión de Coordinación de la nueva legislatura. Una Generalitat de coalición PP-VOX, en la que la responsabilidad sobre seguridad y emergencias ha recaido sobre los correligionarios de Abascal.
Vaya por delante que este artículo solo pretende mostrar mi opinión personal. Habrá quien la comparta al 100% y quien no llegue ni al 50%. La verdad es que lo leido no me ha sorprendido mucho. Era de esperar que como en tantas otras cosas vengan con la motosierra de su amigo Milei. Al tiempo.
Pero algo de positivo va a tener la experiencia. Cuanto más descarada sea la postura de los gestores de la seguridad más abriran los ojos quienes pensaban que no se puede estar peor.
Empecemos por el principio.
A la vista de lo que dice la nota informativa de los representantes de CCOO en la Comisión, la Consellera llego con buenas palabras, animó a los presentes a trabajar y se marchó. Nada extraño por otra parte. Yo no recuerdo a ningún responsable máximo de la Conselleria que se haya remangado hasta el punto de tomar las riendas, normalmente lo dejan en manos de su director general, secretario autonómico, o la figura administrativa que corresponda en cada momento (siempre hombres, por supuesto).
La primera intervención antes de que se marchara la Consellera, la asumió el representante de CCOO ante el silencio de los demás, recordando la falta de recursos humanos en la Agencia y el IVASPE y reclamando la puesta en marcha de todas las normas de desarrollo de la Ley 17/17 que dedaron pendientes de la legislatura anterior.
Después la reunión quedó en manos del Secretario autonómico y Director general de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias (el supuesto chiringuito que tenían que cerrar).